Roser Borotau, Coach del sueño infantil y antigua alumna de La Vall, nos explica algunos consejos para que los más pequeños puedan dormir mejor. Y en algunos casos, que puedan dormir, descansar algo -tanto ellos como los padres-.

Y es que el descanso de los niños es algo que preocupa a muchas familias, ya sea porque no descansan bien durante la noche, porque les cuesta poner a dormir a su peque o porque no consiguen tener buenas siestas durante el día. Siempre hay algunos padres afortunados que aseguran que su hijo no tiene problemas para conciliar el sueño, pero también hay otros que acaban desquiciados por la falta de sueño -la del bebé y la suya-. Uno de cada cuatro niños tiene problemas para conciliarlo, por lo que si eres de ese 25%, este post te resultará interesante.

En primer lugar, tenemos que entender que esto es algo normal y que le sucede a muchas familias. El sueño infantil es un proceso madurativo que evoluciona de manera natural y madura hasta que se consigue dormir de manera independiente y sin despertares. ¿Cuál es uno de los problemas? Que muchas familias no pueden esperar a que esto ocurra de manera natural ya que puede tardar años, y un mal descanso puede tener un impacto negativo en toda la dinámica familiar.

«A partir de los dos años te dormirá del tirón». Muchas veces, los papás han escuchado esta frase pero, llegado ese punto, algunos -los menos afortunados en este sentido- se dan cuenta que siguen teniendo problemas. O quizás la niña duerma toda la noche pero hay que batallar la hora de ir a dormir hasta el punto que puede llegar a influir en la dinámica familiar, o bien hay que insistir en la siesta, despertares tempranos, terrores nocturnos, pesadillas o alguna que otra ida y venida a la cama de los papás.

El objetivo de este post es ayudaros a intentar que vuestros hijos duerman lo suficiente -o incluso más- y que estén bien descansados. Porque de esa manera no sólo estarán mejor ellos, sino que, también, se traducirá en un mejor descanso de toda la familia, mejor humor en casa y mejor rendimiento laboral para papá y mamá.

Algunos tips o consejos para ayudar a nuestros hijos a descansar mejor

  • Crear un buen ambiente de sueño: Una habitación con una temperatura adecuada, sin ruido, oscuridad 100% y pocos estímulos.
  • Proporcionar una rutina: Una de las cosas más importantes. Los niños son “fans” de las rutinas y rituales. Esperan que pasen las cosas cada día de la misma manera y eso le aporta seguridad.
  • Mantener unos horarios adecuados para su edad: Los niños, al igual que los adultos, se rigen por un ritmo circadiano. Nosotros, como animales diurnos que somos, vamos con el sol. Los niños suelen ser madrugadores por naturaleza, siguiendo el horario del sol, y eso se traduce en necesitar acostarse pronto.
  • Respetar sus “ventanas de sueño”: el tiempo máximo que pueden permanecer despiertos. Si dejamos una ventana demasiado larga hasta que vaya a dormir, tendremos a un niño sobre cansado que, además de estar irritable, le costará más dormirse o bien tendrá más despertares durante la noche.
  • Conseguir que tenga independencia para conciliar el sueño: Si un peque se despierta múltiples veces para tomar un biberón, para que mamá lo abrace o para pedir cualquier ayuda externa que lo ayude a volverse a dormir, no conseguiremos que duerma toda la noche si no le enseñamos a dormirse solo sin estas ayudas.

En conclusión, hay que tener en cuenta que no todas las familias desean ayudar a su hijo a tener un sueño independiente, ya que no les importa levantarse a ayudar a su peque a dormirse.

Solo cuando esta dependencia se presenta como un problema para la familia es cuando hay que tomar medidas, siempre desde una perspectiva respetuosa para el niño y acompañándolo en el proceso de aprendizaje hacia la nueva habilidad de dormirse solo.